En la Escuela Helen Keller, creemos firmemente en brindar a nuestros estudiantes una educación integral que abarque tanto el desarrollo académico como el físico y emocional. Por ello, la natación forma parte esencial de nuestras actividades, especialmente para niños con discapacidad visual.
A mediados del año pasado, con la ayuda de nuestros donantes pudimos renovar este espacio para ofrecer las mejores instalaciones a nuestros pequeños.
La natación no solo es una actividad recreativa, sino una herramienta poderosa que aporta múltiples beneficios:
1️.- Fortalece la coordinación motriz: Ayuda a los niños a desarrollar su sentido del equilibrio y orientación en el espacio.
2️.- Aumenta la confianza: Al aprender a moverse en el agua, los niños ganan seguridad en sí mismos y enfrentan nuevos retos con valentía.
3️.- Promueve la inclusión: Al compartir la actividad con otros, refuerzan habilidades sociales y el trabajo en equipo.
En Helen Keller, nuestra misión es ofrecer un entorno donde nuestros estudiantes puedan superar barreras y alcanzar su máximo potencial. La natación es un claro ejemplo de cómo integrando actividades físicas, fortalecemos tanto sus capacidades físicas como su confianza emocional.
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